El mijo es uno de los cereales más antiguos y el origen de su procedencia no están claros aunque los datos los sitúan en la India, África, Asia.
En estos países el mijo constituye uno de los alimentos básicos en la dieta de muchas personas.
Crece de forma salvaje, aunque ya en muchos países es cultivado, y existen varios tipos de mijo, entre ellos destaca el mijo perla que es uno de los más cultivados en todo el mundo.
El mijo podemos conseguirlo en herbolarios, supermercados, tiendas de dietética.
El mijo se puede utilizar como sustituto del arroz y acompañando muchos platos como sopas, las verduras, la carne, el pescado, también en recetas dulces.
También podemos elaborar con este cereal, hamburguesas, croquetas, tortitas, papillas e incluso para elaborar pan junto a otras harinas con gluten, ya que necesita de ellas para
poder crecer.
Es uno de los cereales más ricos en hierro e hidratos de carbono por lo que posee un alto valor energético.
Además de esto contiene vitaminas B1, B2, B9, y minerales como magnesio, hierro, fósforo, sodio, potasio, calcio y es más rico en proteínas que el arroz y el trigo.
Es un cereal que no contiene gluten, esto hace que las personas celiacas puedan consumirlo.
El mijo es recomendado como alimento para combatir estados de debilidad, cansancio, astenia, de anemia y para fortalecer los músculos.
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Escrito por Tere en Nutrición y alimentos
