La higiene es una de las necesidades básicas y un elemento fundamental para el correcto desarrollo del niño-a.
Es un factor de salud, de bienestar físico, psíquico y social que contribuye al bienestar del niño-a y que le previene de enfermedades, alteraciones y trastornos.
Las necesidades básicas de los niños-as van cambiando a medida que crecen y maduran, en sus primeras edades, mientras es pequeño necesitará de los adultos para
la satisfacción de sus necesidades.
A medida que va creciendo debemos conseguir que el niño-a conozcan sus necesidades de higiene y que sientan interés por estar limpios.
La higiene del bebé es fundamental para mantenerlo limpio y sano y se convierte además en un momento de relajación y de contacto especial con los adultos.
La higiene corporal es lograr la limpieza general del niño-a: la limpieza de la piel, del pelo, de las uñas, de los genitales, de los oídos y de la nariz.
Cuando hablamos de higiene no solo se contempla la higiene corporal, deben cuidarse otros aspectos como la higiene del vestido, la higiene del calzado, y la higiene ambiental que abarca la higiene familiar, la higiene escolar y la higiene medioambiental.
Sobre la autora
Escrito por Tere en Bebés y Niños