En un artículo anterior facilitamos una serie de consejos que pueden ayudarnos a la hora de comprar el pescado fresco.
Una vez que ya hemos comprado el pescado fresco lo más importante es no demorarnos para llegar a casa
y prepararlo o conservarlo en la nevera hasta el momento en que vayamos a prepararlo.
Lo aconsejable es dejar la compra del pescado para el final cuando ya hayamos comparado todo para evitar que pierda
el frío y se caliente.
Una vez en casa sí no lo vamos a consumir ese día podemos conservarlo en la nevera durante dos días.
Si no es así también podremos congelarlo.
En caso de que hayamos comprado pescado en una pieza entera y sin que el pescadero lo haya limpiado, antes de congelarlo
debemos tener en cuenta quitarle las tripas y seguidamente lavarlo bien con abundante agua fría por dentro y por fuera.
Escurre bien el agua del pescado y guárdalo en bolsas de plástico de congelación.
A la hora de consumirlo sácalo del congelador y deja que se descongele dentro de la nevera en los estantes inferiores ya que esta parte de
la nevera es la más fría.
Lo más importante a la hora de consumir pescado congelado es que se haya conservado bien sin que en ningún momento se haya
roto la cadena de frío.
Sí en lugar de comprar pescado fresco, decidimos comprar pescado congelado deberíamos prestar atención a una serie de recomendaciones
que nos ayudarán a detectar sí el pescado ha sido congelado en condiciones óptimas o sí en algún momento se ha roto la cadena del frío.
El pescado es sometido a un proceso de congelación rápida, la cual deberá garantizar tanto las propiedades del pescado como su valor nutricional.
Aún así deberíamos seguir una serie de consejos como:
– Igual que sí compráramos pescado fresco, debemos dejar la compra del pescado congelado para el último momento de la compra para
evitar que pierda frío y calidad.
– El pescado congelado que compres no deberá tener escarcha ni cristales de hielo.
– El pescado no debe tener manchas y debe de estar duro y firme.
– Cuando vayamos a comprar pescado tanto congelado como fresco es aconsejable llevar bolsas isotérmicas para conservarlos lo más fresco posible y
evitar que la cadena del frío se rompa.
El pescado una vez que se haya descongelado no debemos volver a congelarlo ya que perderá calidad así como sus propiedades nutricionales.
Sobre la autora
Escrito por Tere en Nutrición y alimentos